1 de marzo de 2021

Turismo sostenible ¿una alternativa posible?

En los últimos meses, el gobierno colombiano emitió la Política de Turismo Sostenible, la cual, al reconocer las diferentes falencias del sector realiza una planeación a futuro con respecto al mismo. A través de un análisis de la medida, se evidencia que, de cara a la actualidad nacional e internacional, deja más interrogantes que respuestas en el camino a una verdadera transformación de este importante sector de la economía global.

Sandra Catalina Aguilar Bejarano*

La política pública de turismo ambiental, se basa en las estadísticas del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés) del año 2019, cuyas cifras demuestran que el sector aportó a la economía global un 10,3% del Producto Interno Bruto (PIB) universal y el 6,8% del comercio mundial[1]. Teniendo como pilar estas cifras, la regulación nacional plantea una restructuración del sector turismo con dos lineamientos, el primero, un enfoque internacional basado en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible; y el segundo, la legitimidad del Estado para imponer el verdadero cumplimiento de una política verde, enfocada en tres dimensiones: económica, socio-cultural y ambiental.

Proyectada en las instituciones gubernamentales, las empresas de turismo y los viajeros, la política en mención, concibe en el turismo sostenible una fuente de riqueza y de equidad social, orientada a todo el sector, mas no, circunscrita al ecoturismo o al viaje de sol y playa. Más aun teniendo en cuenta que este sector de la economía se ejecuta bajo un plan de oferta y demanda.

Teniendo en cuenta el contexto medioambiental de la República de Colombia durante la última década, se espera que con esta normativa se logre posesionar al sector turismo como determinante en la reducción de la contaminación, el reemplazo de la minería, la ganadería o la tala de árboles, actividades que tienen un impacto altamente negativo en el medio ambiente.

Tras el estudio de la actual regulación del turismo se evidencian como diagnóstico de la sostenibilidad las siguientes dificultades:

  1. Ausencia de información confiable para orientar la toma de decisiones sostenibles
  2. Debilidad en la incorporación de criterios ambientales en los procesos de ordenamiento, como en la articulación entre el sector turismo y las autoridades ambientales
  3. Insuficientes incentivos para el aprovechamiento del capital natural
  4. Falta de prácticas de mitigación, control y compensación de los impactos ambientales negativos
  5. Comportamiento y consumo irresponsable por parte de los viajeros y,
  6. Bajo posicionamiento de Colombia como turismo sostenible[2]

Obstáculos que se pueden resumir en: concepción infravalorada de la sostenibilidad por parte de los gobiernos locales, poca inversión en el capital natural, privilegio del turismo masivo frente al turismo de calidad, infringiendo la capacidad de carga[3]; baja articulación entre el sector turismo y las autoridades ambientales, leve consideración de los riesgos ambientales asociados al turismo, entre otras.

Como propuestas a las actuales dificultades en la proyección de un turismo sostenible, se ven las siguientes soluciones:

  1. En lo concerniente a la confiabilidad de la información, se plantea la creación del “Sistema Informado de Desempeño Ambiental del turismo”, y el “InfoTur Sostenible 4.0”, que en pocas palabras implica la digitalización y análisis estadístico del sector
  2. Hablando de la debilidad en los criterios ambientales, se proyecta la “Gestión de Destinos Turísticos Sostenibles”, “los Destinos turísticos Resilientes y Adaptables”; y el “Pacto 2030 por el Turismo Sostenible”, que incluyen desde un cambio en la regulación tanto legal como técnica, como la promoción de turismo en ecosistemas marinos y la incorporación de una política de riesgo y prevención.
  3. En materia de incentivos se establece el programa “Colombia: Potencia turística biodiversa”, junto con los “Incentivos para el Desarrollo de un Turismo Sostenible” y el “estímulo a la innovación para el turismo sostenible”, que implica la diversificación del turismo, junto con el reconocimiento de incentivos tributarios.
  4. Se plantea como solución para la gestión sostenible y responsable del capital natural por parte del sector turista: “Cimientos para la producción sostenible del turismo”, una “hoja de ruta por una industria turística verde”, y “la búsqueda de la calidad turística sostenible” que implican la elaboración y divulgación de una guía práctica para el buen turismo, y capacitaciones para esta buena práctica.
  5. Para fomentar la cultura de viaje sostenible se tiene el programa “Cultura turística sostenible”, centralizada en el uso eficiente del agua, el manejo responsable de los residuos sólidos y aguas residuales, como la disminución de las emisiones atmosféricas.
  6. En lo concerniente al posicionamiento de Colombia como turismo sostenible se tienen “Colombia, nuevo destino sostenible de Suramérica” y “mercadeo y promoción turística con enfoque sostenible” referentes a estrategias de publicidad y promoción.

Llegado a este punto, se hace necesario analizar de forma crítica los objetivos planteados en la Política de Turismo Sostenible.  En primer lugar, se debe reconocer el gran esfuerzo realizado por parte del gobierno nacional en la estructuración de una política para el desarrollo del sector turismo. Sin embargo, se encuentran varias dificultades para su aplicación: la primera es que dada la situación de sanidad actual -a saber, la pandemia ocasionada por el virus SARS-Co-V2 o Covid 19-, el sector turismo ha decaído gravemente, factor que no se ha tenido en cuenta; en segundo lugar, que los lineamientos promulgados reflejan una proyección que privilegia la dimensión económica sobre la protección medio ambiental; y, en tercer lugar, que no se considera a las comunidades locales, como un actor decisivo dentro del nuevo plan de turismo.

A modo de conclusión, si bien la Política de Turismo Sostenible tiene un balance general positivo, se prevén obstáculos en su implementación, en razón a la crisis actual por la que atraviesa el turismo debido a la carencia de demanda, la ausencia de datos actualizados, y la dificultad logística en la ejecución de una política interministerial en el tema, lo cual genera más dudas que planteamientos certeros para una política de turismo verde. En palabras del gobierno nacional, el reto de esta política “es generar la percepción de corresponsabilidad por parte de los diferentes actores de la cadena turística”[4].


*Estudiante miembro del Semillero “Observatorio de Conflictos Ambientales”.

[1] Política de turismo sostenible. Ministerio de Comercio, Industria y turismo. República de Colombia. 2020. Párr. 9

[2] Política de turismo sostenible. Ministerio de Comercio, Industria y turismo. República de Colombia. 2020. Párr. 75

[3] Número máximo de personas que una zona puede soportar para su aprovechamiento turístico. Política de turismo sostenible. Ministerio de Comercio, Industria y turismo. República de Colombia. 2020. Párr. 92

[4] Número máximo de personas que una zona puede soportar para su aprovechamiento turístico. Política de turismo sostenible. Ministerio de Comercio, Industria y turismo. República de Colombia. 2020. Párr. 52


Imagen tomada de: https://ecologismos.com/hoteles-ecologicos-con-encanto-para-disfrutar-del-descanso/