2 de octubre de 2020
¿Cuál es el régimen de protección de los glaciares y los humedales en Colombia?
Este tema es analizado por María del Pilar García Pachón en el capítulo de investigación “La conservación de glaciares y humedales como ecosistemas proveedores de agua dulce a través del SINAP” publicado en el libro “La conservación de la naturaleza. Su régimen jurídico en Colombia y España” (2018).
Por: Diana Quevedo Niño
Colombia es un país reconocido por su riqueza hídrica y por la diversidad de ecosistemas que producen agua dulce y que son la fuente abastecedora de agua potable para múltiples municipios del país. Esto ha sido reconocido por el ordenamiento jurídico colombiano que ha desarrollado un régimen de protección a partir de las disposiciones del Convenio de Diversidad Biológica, el Decreto Ley 2811 de 1974 y el Sistema Nacional de Áreas Protegidas.
De otro lado, la actual emergencia climática genera riesgos en torno a la seguridad hídrica, especialmente en Colombia, donde los impactos del cambio climático en el recurso hídrico constituyen el tercer factor de vulnerabilidad del país frente a este fenómeno. También se espera que el cambio climático genere impactos negativos significativos en la biodiversidad del país, incluyendo la pérdida acelerada de las masas glaciares, por lo que se considera que los glaciares son ecosistemas altamente vulnerables frente a los impactos de la variación climática.
La importancia que tienen los glaciares y humedales como ecosistemas proveedores de agua dulce y las posibles consecuencias del cambio climático sobre estos ecosistemas exige la configuración de un régimen de protección específico que permita la conservación de estas áreas, lo cual es el objeto de la investigación de la autora en este artículo.
En relación con los seis glaciares ubicados en el territorio colombiano, la autora resalta la protección que tienen estos ecosistemas desde 1959 cuando todos los nevados del país fueron declarados Parques Nacionales Naturales, los cuales, de acuerdo con la Constitución Política de 1991, son bienes de uso público (inalienables, imprescriptibles e inembargables). A pesar de esta categorización y de que en los planes de manejo de estas áreas protegidas se ha incluido la necesidad de conservar el recurso hídrico, las acciones no han sido suficientes y se espera que estos ecosistemas desaparezcan en las próximas tres a cuatro décadas.
En cuanto a los humedales, la autora señala la existencia de más de 88 categorías de humedales en el país y 48.000 registros agrupados en 134 complejos, para posteriormente hacer un estudio sobre la naturaleza jurídica y los instrumentos de protección de estos ecosistemas. Frente a estos últimos, se hace referencia a la Política Nacional para Humedales Interiores, los Planes Nacionales de Desarrollo, la Convención RAMSAR, las resoluciones 0157 de 2004,1128 de 2006, 196 de 2006, la sobretasa ambiental de la Ley 981 de 2005. Por último, la autora señala que, a pesar de un régimen jurídico para su protección, se identifica una ausencia de delimitación y de expedición de los planes de manejo para los humedales, lo cual impide su adecuada conservación y restauración.
Finalmente, la autora concluye que el Estado ha desarrollado diversos instrumentos políticos y jurídicos para la protección y conservación de los glaciares y los humedales como ecosistemas proveedores de agua. A pesar de ello, en el caso de los humedales, son pocos los que se encuentran bajo una categoría de protección del SINAP o de la Convención RAMSAR, lo cual exige que se aumenten las estrategias encaminadas a su protección para evitar su deterioro o desaparición.
Cita: García Pachón, M.P. (2018). La conservación de glaciares y humedales como ecosistemas proveedores de agua dulce a través del SINAP. En La conservación de la naturaleza. Su régimen jurídico en Colombia y España (pp. 85-115) Bogotá: Universidad Externado de Colombia.
Nota: Para acceder a todo este capítulo de investigación visite https://bdigital.uexternado.edu.co/bitstream/001/2118/1/MKA-spa-2018-La_conservacion_de_glaciares_y_humedales_como_ecosistemas_proveedores_de_agua_dulce_a_traves_del_SINAP